Mi primera experiencia en la
creación de un blog se tituló “Destruyendo armas en Camboya”; proyecto para un
curso de tecnologías de la información. Si me preguntaran el tema de este,
podría apuntar que era lo más parecido a un “arroz con mango”, una especie de
híbrido entre la creación literaria y la crítica de cine. Solo dos post que
cayeron en el irremediable olvido.
La segunda experiencia fue el
blog del colectivo de poesía Ánima Lisa, grupo del que formo parte. La idea de
este es presentar (pues todavía está en uso), el trabajo del grupo, además de publicar
los poemas de cada uno de los miembros. El diseño de este fue un parto que
terminó en variadas mutaciones que me permitieron conocer las capacidades de
las plataformas de creación de blogs.
Un tercero que, actualmente está
en mis manos, es uno propio en el que posteo los poemas que escribo y uno que
otro cuento pequeño. No me esforcé tanto en la presentación, pues lo que
importa en él es el contenido (al menos eso creo). Quizá he debido prestarle
mayor atención; el problema de tener un blog de creación literaria (al menos a
eso aspiro) es que depende de si estoy de humor o no.
Actualmente me encargo de
retransmitir noticias en el blog de la Red Internacional de Estudios Interculturales en la plataforma de Blogs PUCP. A diferencia de los anteriores,
este recibe una gran cantidad de visitas y es constantemente actualizado. Coinciden
con los cuatro párrafos de esta semi biografía bloguera, mis experiencias de
este tipo. Ahora empieza la quinta, denominada La Cinemateca.
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